Llevo mas de un año sin escribir una entrada. Desenchufé el ordenador para hacer obra en casa y acabo de volver a instalarlo. Pero bueno, espero volver a dejar recetas guardadas que me viene de maravilla para no perderlas.
En este tiempo las cosas han cambiado y miro mucho Instagram donde he encontrado cuentas que me encantan y aunque he cocinado alguna de sus recetas no he dejado constancia de ello.
Comienzo esta nueva etapa con la publicación de una mermelada de calabaza que todavía voy a perfeccionar. De hecho, tengo dos recetas distintas para publicar y no se cual me gusta mas.
Estamos en época de calabaza y este año me he encontrado con mucha cantidad.
Aparte de en puré o en forma de pisto me pareció que quedaría rica en forma de mermelada ya que su sabor es dulce y suave.
Aquí va la primera de ellas.
Ingredientes:
-2k de calabaza pelada, sin pepitas y cortada en dados
-2 naranjas peladas quitando tambien la piel blanca que las recubre
-Corteza de naranja (yo le puse la mitad de una naranja)
-Una cucharada sopera de jengibre molido
-Unos clavos de olor (yo le puse 4)
-Un palo de canela
-600g de azúcar.
La noche anterior dejar en una cazuela amplia la calabaza troceada junto con el azúcar reposar durante unas seis horas como mínimo para que suelte el jugo.
Pasado ese tiempo poner al fuego junto con la naranja pelada y troceada, la piel de naranja, el clavo, jengibre y canela.
Remover bastante a menudo y dejar que la calabaza se haga puré. Tardará alrededor de una hora.
Pasado ese tiempo, sacar el palo de canela , los clavos y la piel de la naranja y triturar con batidora.
Llenar botes de cristal previamente esterilizados en agua hirviendo y tapar. Esta operación es mejor hacerla en caliente teniendo cuidado de no quemarse.
Cerramos con la tapa y ponemos boca abajo hasta que enfríen. De esta manera el bote hace vacío y no hace falta poner a cocer los tarros.
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